Los médicos expertos han concluido recientemente que el blindaje del paciente durante el diagnóstico con imágenes médicas, una práctica común por más de 70 años, ya no es necesario.
En los años 50, los médicos comenzaron a proteger las glándulas reproductivas y el feto de una mujer embarazada durante la toma de imágenes médicas. En esos tiempos, los médicos expertos no estaban seguros de los efectos a largo plazo de la exposición a la radiación de un feto no nacido y de las células reproductoras de los testículos y los ovarios. También estaban preocupados por el hecho de que las células reproductivas dañadas podrían ser pasadas a las generaciones futuras.
Las tecnología de imágenes médicas ha hecho avances significativos durante los últimos 70 años. Los hospitales y los centros de imágenes ahora tienen mejores aparatos para la toma de imágenes que utilizan mucho menos radiación. Estos nuevos aparatos pueden reducir hasta un 96% la exposición de las glándulas reproductivas a la radiación durante la toma de imágenes pélvicas. Hoy en día, los científicos y los investigadores también saben más con respecto a cómo la radiación afecta el cuerpo humano. Evidencia científica muestra que los exámenes de diagnóstico por imagen de rutina no exponen al paciente o al feto a niveles dañinos de radiación. Luego de años de investigaciones, no existe evidencia del daño a las gónadas luego de la toma de imágenes médicas de rutina.
No existe evidencia de que la protección beneficie la salud del paciente. De hecho, el blindaje podría causar daño porque podría cubrir una parte del cuerpo que el radiólogo necesita ver. Si esto sucede, el médico podría necesitar repetir el examen por imágenes.
Como resultado, la Asociación Americana de Físicos en Medicina (AAPM, por sus siglas en inglés) recomienda a los médicos el dejar de utilizar el blindaje de las gónadas y el feto durante el diagnóstico por imágenes a base de rayos X. La AAPM representa a los físicos médicos, que juegan un papel importante en asegurar que los aparatos de toma de imágenes médicas funcionen adecuadamente y de forma segura. Varios grupos médicos, incluyendo la Sociedad Radiológica de Norteamérica y el Colegio Americano de Radiología, apoyan esta recomendación.
Cambiar las prácticas llevadas a cabo durante una década no es fácil. Si a usted le han tomado imágenes utilizando blindaje, podría tener miedo de hacerse un examen sin blindaje. Las madres embarazadas o los padres de niños a los que se les están tomando imágenes podrían sentirse particularmente ansiosos con respecto a este cambio. También existen muchas fuentes de desinformación en línea que hace difícil el encontrar información precisa. Finalmente, algunos estados aún no han actualizado sus regulaciones y todavía requieren de protección.
Los pacientes pueden estar seguros de que en los hospitales y en los centros de imágenes se utiliza el principio ALARA (dosis lo más baja posible). Esto significa que los médicos utilizan la cantidad más pequeña de radiación necesaria para obtener imágenes de calidad. Más y más hospitales han dejado de utilizar blindaje para los pacientes. Sin embargo, los centros de imágenes en los estados que aún requieren del uso de blindaje seguirán las normas de seguridad para su utilización. Si tiene preguntas sobre las políticas que se utilizan adonde usted se hace la toma de imágenes, por favor pregúntele a su médico.
Para aprender más sobre la seguridad de las imágenes médicas, vea la sección sobre Seguridad del paciente.